España está haciendo muchos esfuerzos por impulsar la trasformación de la movilidad personal y crear ciudades más sostenibles y habitables. Los municipios de más de 50.000 habitantes (147 ayuntamientos) y los de más de 20.000 habitantes con problemas de contaminación, deberán cumplir con la obligatoriedad de definir ZBEs en enero de 2023, como la zona “Madrid 360”, pionera junto con la Zona de Bajas Emisiones de Barcelona.

Este es un primer paso dentro del objetivo de reducir las emisiones de los gases de efecto invernadero (GEI) para alcanzar la neutralidad de emisiones a 2050, según la Ley de Cambio Climático y Transición Energética que entró en vigor justo hace un año (mayo 2021).

Las ZBE se encuadran en el marco de las directivas europeas para la mejora de la calidad del aire y la lucha contra el cambio climático. Hay otras normativas en camino en esta dirección, como es la Ley de Movilidad Sostenible, normativas sobre puntos de recarga, o el Proyecto de Real Decreto para regular las Zonas de Bajas Emisiones en marcha.

España se encuentra en plena fase de transición de la movilidad eléctrica y está destinando grandes recursos económicos (nivel estatal, comunidades autónomas y ayuntamientos) para liderar la transformación de la movilidad eléctrica.

En este contexto urbano limpio y sostenible, las motos eléctricas se están convirtiendo en las grandes protagonistas de la ciudad. Los vehículos de dos ruedas tienen todo el sentido y se están convirtiendo en las herramientas claves para todos estos municipios que han de impulsar zonas libres de humos y ruidos.

Los municipios de más de 50.000 habitantes y los de más de 20.000 con problemas de contaminación, deberán definir ZBEs en 2023